Chloë Grace Moretz es conocida por su activismo feminista, a parte de por su talento como actriz, sin embargo la polémica se ha cebado con su nueva película de animación, incluso antes del estreno. La película se titula "Red Shoes and the 7 Dwarfs" (Zapatos Rojos y los 7 Enanitos). Es una reinvención del clásico que todos conocemos, o eso pretende.
El problema ha venido a la hora de comercializar el film. La productora, nos muestra a una
estilizada y maquillada Blancanieves metida en unos tacones rojos, mirando de reojo a otra versión de sí misma, más entrada en carnes, más natural y con los tacones en la mano. Además de la imagen, que ya dice bastante, un letrero dice "¿Qué pasaría si Blancanieves ya no fuera hermosa, y los 7 enanitos no tan bajos?". A tope con el bodyshaming. Di que sí.
El periodista de Vulture, Kyle Buchanan, vio el cartel en Cannes y lo viralizó rápidamente, cuestionando el mal gusto del mismo. Desde entonces, muchas han sido las críticas que ha recibido el film, al igual que su trailer, en el cual los enanitos se esconden mientras Blancanieves se desnuda (sí, lo que leéis) y al quitarse los tacones aparece la versión gordita y despreocupada que ya veíamos en el póster. Han ido sumando puntos...
Chloë Grace ha dicho en su twitter que ni ella ni su equipo apoyaban, en ningún momento, este tipo de publicidad y que está tan enfadada como lo estamos los demás. La productora se ha disculpado y ha retirado la publicidad que había hasta ahora.
Sin embargo, esto nos hace preguntarnos si la película estará bien planteada. Sabemos que la intención de Moretz es, precisamente, la de romper estereotipos de belleza, pero ¿lo conseguirá con un mensaje al estilo "aunque esté gordita y sea fea, es muy buena por dentro"?
Quizá el enfoque debería ser que es igual de hermosa en una versión que en la otra y que, precisamente, su aspecto no es mejor ni peor en ninguna de las dos Blancanieves que presenta.
Seguiremos de cerca el proyecto, esperando que no naufrague con un mensaje equivocado.
El problema ha venido a la hora de comercializar el film. La productora, nos muestra a una
estilizada y maquillada Blancanieves metida en unos tacones rojos, mirando de reojo a otra versión de sí misma, más entrada en carnes, más natural y con los tacones en la mano. Además de la imagen, que ya dice bastante, un letrero dice "¿Qué pasaría si Blancanieves ya no fuera hermosa, y los 7 enanitos no tan bajos?". A tope con el bodyshaming. Di que sí.
El periodista de Vulture, Kyle Buchanan, vio el cartel en Cannes y lo viralizó rápidamente, cuestionando el mal gusto del mismo. Desde entonces, muchas han sido las críticas que ha recibido el film, al igual que su trailer, en el cual los enanitos se esconden mientras Blancanieves se desnuda (sí, lo que leéis) y al quitarse los tacones aparece la versión gordita y despreocupada que ya veíamos en el póster. Han ido sumando puntos...
Sin embargo, esto nos hace preguntarnos si la película estará bien planteada. Sabemos que la intención de Moretz es, precisamente, la de romper estereotipos de belleza, pero ¿lo conseguirá con un mensaje al estilo "aunque esté gordita y sea fea, es muy buena por dentro"?
Quizá el enfoque debería ser que es igual de hermosa en una versión que en la otra y que, precisamente, su aspecto no es mejor ni peor en ninguna de las dos Blancanieves que presenta.
Seguiremos de cerca el proyecto, esperando que no naufrague con un mensaje equivocado.
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